05 de abril - MIÉRCOLES SANTO, feria



   MIÉRCOLES SANTO, feria
  Oficio propio del Miércoles de la Semana II del Salterio
  (Liturgia de las Horas, Tomo II: Oficio de Lecturas Laudes - Tercia - Sexta   Nona Vísperas - Completas)
 



PROGRAMA PARROQUIAL:
MIÉRCOLES, 05 DE ABRIL

PARROQUIA DEL CARMEN:

- A las 10.00: Visita del Sr. Obispo.

- A las 10.30: Santa Misa de salida.

- A las 16.45: Salida procesional para estación de penitencia, (recogida sobre las 01.30 h. del día 6).

PARROQUIA DE LOS DOLORES:

- Día sin Misa por motivo de la Procesión de la Hdad. del Prendimiento.



HORARIOS PARA LAS CELEBRACIONES
DE SEMANA SANTA 2023






NUEVOS HORARIOS DE VERANO:
A PARTIR DE HOY, SÁBADO 1 DE ABRIL, LAS MISAS DE LA TARDE SERÁN:

- EN LA PARROQUIA DEL CARMEN, A LAS 19.00 H.

-EN LA PARROQUIA DE LOS DOLORES, A LAS 20.00H






NOTICIAS DE ACTUALIDAD

El Papa Francisco ha presidido la celebración del Domingo de Ramos en el Vaticano

"Para nosotros, discípulos del Abandonado, nadie puede ser abandonado"


En la santa misa del Domingo de Ramos el Pontífice reflexionó sobre la fe que Jesús puso en Dios, sin ceder a la desesperación, sino rezando y encomendándose al Padre. Asimismo, el Santo Padre llamó a no olvidar la existencia de múltiples "Cristos abandonados" en el mundo de hoy y exhortó a estar cerca de ellos.








Portada

Un accidente, un atraco de gángsters, el Covid... Los católicos le ayudaban en todo

Budista, un «brote sagrado» y una misteriosa protección ante el peligro le llevaron a abrazar la fe

España sufre nuevas leyes de aborto, eutanasia, acoso a la libre expresión y a objetores

7 razones para ir a la marcha provida del domingo: médicos que matan, se prohíbe rezar e informar...

Lo afirmó un día después de la exigencia de su revisión por el Sínodo de los obispos alemanes

Francisco: el celibato es «temporal», pero suprimirlo «no traerá la solución» a la crisis vocacional

Vídeos

  Sobre Antonio Rivera, «el ángel del Alcázar»

  San Pablo: misión que impresiona

  Lección práctica para rezar bien

  Aquí fue proclamada Isabel la Católica

  Estreno de «Purgatorio»

Otras noticias

  El Camino Sinodal aprueba las ordenaciones trans, homilías de laicos o bendecir uniones homosexuales

  «¿Sin carne en viernes? En Etiopía no comíamos nunca»: una misionera y Misión Jatari en Supergesto

  Cantalamessa y la «chispa»: la palabra de Dios a veces actúa sin que la vivas, pero es la excepción

Opinión

  Reconstruyendo mi Cristo roto , por Ignacio Segura Madico

Blogs

  Cuaresma y santidad , por La Columna del #CoronelPakez

  Hoy el reto del amor es hacer dos cosas pequeñas con paz , por El Reto Del Amor

  El protagonista. Comentario para Matrimonios: Lucas 15, 1-3. 11-32 , por ProyectoAmorConyugal.es

  Más riqueza material pero menos riqueza ética , por Familia, Educación y Cultura


SANTORAL DE HOY

Elogio: San Vicente Ferrer, presbítero de la Orden de Predicadores, de origen español, que recorrió incansablemente ciudades y caminos de Occidente en favor de la paz y la unidad de la Iglesia, predicando a pueblos innumerables el Evangelio de la penitencia y la venida del Señor, hasta que en Vannes, lugar de Bretaña Menor, entregó su espíritu a Dios.

Patronazgos: patrono de Valencia (España) y Vannes (Francia), de los fabricantes de ladrillos, los trabajadores de la madera, constructores, techadores y fontaneros, protector contra los dolores de cabeza, la epilepsia, fiebre, y amenazas de todo tipo, para pedir un buen matrimonio, fecundidad, y una santa muerte.

Tradiciones, refranes, devociones: En Valencia no se celebra el día 5 de abril sino el lunes siguiente al II Domingo de Pascua, y los festejos comienzan dos días antes. En particular es muy lindo el domingo, en el que grupos de chicos representan, en la calle, los "miracles" del santo, autos teatrales que se recitan en valenciano.

En la imaginería el santo es representado siempre con el dedo amenazador, anunciando el Juicio de Dios; sin embargo en Paterna, una ciudad casi a la salida de Valencia, se encuentra una de las pocas -la gente del lugar dice que la única- representaciones del santo donde no está con actitud amenazadora, sino postrado ante la cruz y de brazos abiertos: la razón es que el Cristo de ese pueblo (el Santísimo Cristo de la Fe, el "Morenet") es al que el santo iba a rezarle cuando podía "escaparse" de la vorágine de la predicación.


   Santa Irene, virgen y mártir   

En Tesalónica, ciudad de Macedonia, santa Irene, virgen y mártir, que por haber ocultado los libros sagrados, en contra de la prohibición del emperador Diocleciano, fue conducida a un lupanar público y después quemada por orden del prefecto Dulcecio, bajo cuyo mandato también sus hermanas Ágape y Cionia habían padecido, poco antes, el martirio. († 305)

   Santa Ferbuta, mártir

En Seleucia, en Persia, santa Ferbuta, viuda, hermana de san Simeón, obispo, que, junto con su sierva, fue martirizada en tiempo del rey Sapor II. († c. 342)

   Santos Ciento veinte Mártires de Persia, mártires   

También en Seleucia, conmemoración de ciento once varones y nueve mujeres, mártires, que, procedentes de varias ciudades regias, por haber rehusado firmemente renegar de Cristo y adorar el fuego, por mandato del mismo rey fueron quemados vivos. († 344)

   Santos Mártires de Mauritania, mártires

En Regie, en Mauritania, pasión de los santos mártires, que en la persecución bajo Genserico, rey arriano, recibieron la muerte en la iglesia el día de Pascua; entre ellos estaba el lector, que, mientras cantaba el Aleluya en el púlpito, fue traspasado con una saeta en la garganta. († s. V)

   San Geraldo, abad   

En el monasterio de Grande-Sauve, en Aquitania, san Geraldo, abad, que desde el monasterio de Corbie fue elegido abad de Laon, pero, pasado un tiempo, tras varias peregrínaciones santas, se retiró a la espesura del bosque. († 1095)

   San Alberto de Montecorvino, obispo   

En Montecorvino, en la Apulia, san Alberto, obispo, que dedicó su vida a la oración continua y a buscar el bien de los pobres. († 1127)

   Santa Juliana, virgen y reclusa   

En el lugar de Fosses, en Brabante, santa Juliana, virgen de la Orden de San Agustín, que fue priora de Mont-Cornillon, junto a Lieja, y llevó después vida recluida, en la cual, fortalecida con gracias especiales, promovió la solemnidad del Cuerpo de Cristo. († 1258)

   Santa Catalina Tomás, virgen   

En la ciudad de Palma, en la isla de Mallorca, en España, santa Catalina Tomás, virgen, que, habiendo ingresado en la Orden de Canonesas Regulares de San Agustín, destacó por su humildad y la abnegación de la voluntad. († 1574)

   Santa María Crescencia Höss, virgen   

En Kaufbeuren, junto al río Iller, en Baviera, santa María Crescencia (Ana) Höss, virgen, que ingresó en la Tercera Orden Regular de San Francisco y procuró comunicar a los demás el fervor del Espíritu Santo con el que ella misma ardía. († 1744)

   Beata Catalina de María Rodríguez, viuda y fundadora   

En Córdoba, Argentina, beata Catalina de María Rodríguez, viuda y fundadora de la congregación de Esclavas del Corazón de Jesús. († 1896)

   Beato Mariano de la Mata Aparicio, presbítero   

En São Paulo, Brasil, beato Mariano de la Mata Aparicio, presbítero. († 1983)


LITURGIA DE HOY


DIRECTORIO SOBRE
LA PIEDAD POPULAR Y LA LITURGIA

La Semana Santa

138. "Durante la Semana Santa la Iglesia celebra los misterios de la salvación actuados por Cristo en los últimos días de su vida, comenzando por su entrada mesiánica en Jerusalén".

Es muy intensa la participación del pueblo en los ritos de la Semana Santa. Algunos muestran todavía señales de su origen en el ámbito de la piedad popular. Sin embargo ha sucedido que, a lo largo de los siglos, se ha producido en los ritos de la Semana Santa una especie de paralelismo celebrativo, por lo cual se dan prácticamente dos ciclos con planteamiento diverso: uno rigurosamente litúrgico, otro caracterizado por ejercicios de piedad específicos, sobre todo las procesiones.

Esta diferencia se debería reconducir a una correcta armonización entre las celebraciones litúrgicas y los ejercicios de piedad. En relación con la Semana Santa, el amor y el cuidado de las manifestaciones de piedad tradicionalmente estimadas por el pueblo debe llevar necesariamente a valorar las acciones litúrgicas, sostenidas ciertamente por los actos de piedad popular.

Domingo de Ramos

Las palmas y los ramos de olivo o de otros árboles

139. "La Semana Santa comienza con el Domingo de Ramos "de la Pasión del Señor", que comprende a la vez el triunfo real de Cristo y el anuncio de la Pasión".

La procesión que conmemora la entrada mesiánica de Jesús en Jerusalén tiene un carácter festivo y popular. A los fieles les gusta conservar en sus hogares, y a veces en el lugar de trabajo, los ramos de olivo o de otros árboles, que han sido bendecidos y llevados en la procesión.

Sin embargo es preciso instruir a los fieles sobre el significado de la celebración, para que entiendan su sentido. Será oportuno, por ejemplo, insistir en que lo verdaderamente importante es participar en la procesión y no simplemente procurarse una palma o ramo de olivo; que estos no se conserven como si fueran amuletos, con un fin curativo o para mantener alejados a los malos espíritus y evitar así, en las casas y los campos, los daños que causan, lo cual podría ser una forma de superstición.

La palma y el ramo de olivo se conservan, ante todo, como un testimonio de la fe en Cristo, rey mesiánico, y en su victoria pascual.


Introducción al Triduo pascual

140. Todos los años en el «sacratísimo triduo del Crucificado, del Sepultado y del Resucitado», o Triduo pascual, que se celebra desde la misa vespertina del Jueves en la cena del Señor hasta las Vísperas del Domingo de Resurrección, la Iglesia celebra, «en íntima comunión con Cristo su Esposo», los grandes misterios de la redención humana.


Otras observaciones

- Es sagrado el ayuno pascual de los dos primeros días del Triduo, en los cuales, según la antigua tradición, la Iglesia ayuna «porque el Esposo le ha sido arrebatado». El Viernes Santo de la Pasión del Señor hay que observar en todas partes el ayuno y la abstinencia, y se recomienda que se observe también durante el Sábado Santo, a fin de que la Iglesia pue- da llegar con espíritu abierto a la alegría del Domingo de Resurrección (cf. PCFP, n. 39).

- Las celebraciones de la primera parte del Triduo (misa vespertina del Jueves Santo y celebraciones del Viernes y Sábado Santos durante el día) son intensamente sobrias; en cambio la Noche Santa de la Resurrec- ción es una fiesta rebosante de alegría. El paso de la tristeza al gozo se expresa en la misma Vigilia pascual, celebración del tránsito de Cristo, de su muerte a su resurrección. Que se haga este paso en la liturgia es fundamental, para captar la realidad salvífica que se conmemora. La culminación del Triduo pascual es la Vigilia pascual, en la que hacemos memoria sacramental de la resurrección del Señor.

- Para la celebración adecuada del Triduo pascual se requiere un número conveniente de ministros y colaboradores, que han de ser instruidos cuidadosamente acerca de lo que han de hacer (PCFP, n. 41).

- No se celebren los oficios del Triduo pascual en aquellos lugares donde falte el número suficiente de participantes, ministros y cantores, y procúrese que los fieles se reúnan para participar en una iglesia más importante (PCFP, n. 43).

- Los pastores no dejen de explicar a los fieles, en el mejor modo posible, el significado y la estructura de las celebraciones, preparándoles a una participación activa y fructuosa (PCFP, n. 41).

- Tiene una importancia especial en las celebraciones de la Semana Santa, y especialmente durante el Triduo pascual, el canto del pueblo, de los ministros y del sacerdote celebrante, porque es concorde a la solemnidad de dichos días y, también, porque los textos adquieren toda su fuerza precisamente cuando son cantados (cf. PCFP, n. 42).

- En la celebración del matrimonio se advertirá a los esposos que tengan en cuenta la naturaleza peculiar de este tiempo litúrgico. En ningún caso se celebrará el matrimonio el Viernes Santo ni el Sábado Santo (cf. Ritual del matrimonio, n. 32).

- La práctica de organizar en una misma comunidad parroquial dos vigilias pascuales, una abreviada y otra muy desarrollada, es incorrecta, como contraria a los más elementales principios de la celebración pascual, que requieren una única asamblea, signo de la única Iglesia que se renueva en la celebración de los Misterios pascuales. Hay que favorecer el hecho de que los grupos particulares tomen parte en la celebración común de la Vigilia pascual, de suerte que todos los fieles, formando una única asamblea, puedan experimentar más profundamente el sentido de pertenencia a la comunidad eclesial.


Misa de feria (morado).

MISAL: ants. y oracs. props., Pf. II de la Pasión del Señor.

LECC.: vol. II.

- Is 50, 4-9a. No escondí el rostro ante ultrajes.
- Sal 68. R. Señor, que me escuche tu gran bondad el día de tu favor.
- Mt 26, 14-25. El Hijo del hombre se va como está escrito; pero, ¡ay de aquel por quien es entregado!

* Hoy no se permiten otras celebraciones, excepto la misa exequial.

Liturgia de las Horas: oficio de feria.

Martirologio: elogs. del 14 de abril, pág. 255.


RITOS INICIALES

Antífona de entrada Cf. Flp 2, 10. 8. 11

Al nombre de Jesús toda rodilla se doble en el cielo, en la tierra, en el abismo: porque él se ha hecho obediente hasta la muerte y una muerte de cruz; por eso es Señor, para gloria de Dios Padre.


Acto penitencial

Todo como en el Ordinario de la Misa. Para la tercera fórmula pueden usarse las invocaciones que se proponen a continuación.

Recordando la pasión de Cristo, pedimos perdón por nuestros pecados:

- Señor Jesús, azotado y coronado de espinas. Señor, ten piedad.

R. Señor ten piedad.

- Jesús, condenado a muerte y cargado con el peso de la cruz. Cristo, ten piedad.

R. Cristo, ten piedad.

- Jesús, crucificado en el Calvario, que atraes a todos hacia ti. Señor ten piedad.

R. Señor, ten piedad.

Oración colecta

Oh, Dios que, para libramos del poder del enemigo,
quisiste que tu Hijo soportase por nosotros el suplicio de la cruz,
concédenos a tus siervos alcanzar la gracia de la resurrección.
Por nuestro Señor Jesucristo.

LITURGIA DE LA PALABRA

PRIMERA LECTURA
No escondí el rostro ante ultraje

Lectura del libro de Isaías Is 50,4-9a

EL SEÑOR DIOS me ha dado una lengua de discípulo;
para saber decir al abatido una palabra de aliento.
Cada mañana me espabila el oído,
para que escuche como los discípulos.
El Señor Dios me abrió el oído;
yo no resistí ni me eché atrás.
Ofrecí la espalda a los que me golpeaban,
las mejillas a los que mesaban mi barba;
no escondí el rostro ante ultrajes y salivazos.
El Señor Dios me ayuda,
por eso no sentía los ultrajes;
por eso endurecí el rostro como pedernal,
sabiendo que no quedaría defraudado.
Mi defensor está cerca,
¿quién pleiteará contra mí?
Comparezcamos juntos,
¿quién me acusará?
Que se acerque.
Mirad, el Señor Dios me ayuda,
¿quién me condenará?

Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL (Sal 68, 8-10. 21-22. 31 y 33-34 [R.: 14c y b])



V. Por ti he aguantado afrentas,
la vergüenza cubrió mi rostro.
Soy un extraño para mis hermanos,
un extranjero para los hijos de mi madre.
Porque me devora el celo de tu templo,
y las afrentas con que te afrentan caen sobre mi.

R. Señor, que me escuche tu gran bondad el día de tu favor.

V. La afrenta me destroza el corazón, y desfallezco.
Espero compasión, y no la hay;
consoladores, y no los encuentro.
En mi comida me echaron hiel,
para mi sed me dieron vinagre.

R. Señor, que me escuche tu gran bondad el día de tu favor.

V. Alabaré el nombre de Dios con cantos,
proclamaré su grandeza con acción de gracias.
Miradlo, los humildes, y alegraos;
buscad al Señor, y revivirá vuestro corazón.
Que el Señor escucha a sus pobres,
no desprecia a sus cautivos.

R. Señor, que me escuche tu gran bondad el día de tu favor.


Versículo antes del Evangelio (Opción 1)
Salve, Rey nuestro, sólo tu te has compadecido de nuestros errores

Versículo antes del Evangelio (Opción 2)
Salve, Rey nuestro, obediente al Padre; fuiste llevado a la crucifixión, como manso cordero a la matanza.


EVANGELIO 
El Hijo del hombre se va como está escrito; pero, ¡ay de aquel por quien es entregado!

╬ Lectura del santo Evangelio según san Mateo Mt 26, 14-25
R. Gloria a ti, Señor.

EN AQUEL TIEMPO, uno de los Doce, llamado Judas Iscariote, fue a los sumos sacerdotes y les propuso:
«¿Qué estáis dispuestos a darme si os lo entrego?».
Ellos se ajustaron con él en treinta monedas de plata. Y desde entonces andaba buscando ocasión propicia para entregarlo.
El primer día de los Ácimos se acercaron los discípulos a Jesús y le preguntaron:
«¿Dónde quieres que te preparemos la cena de Pascua?». Él contestó:
«Id a la ciudad, a casa de quien vosotros sabéis, y decidle:
“El Maestro dice: mi hora está cerca; voy a celebrar la Pascua en tu casa con mis discípulos”».
Los discípulos cumplieron las instrucciones de Jesús y prepararon la Pascua.
Al atardecer se puso a la mesa con los Doce. Mientras comían dijo:
«En verdad os digo que uno de vosotros me va a entregar».
Ellos, muy entristecidos, se pusieron a preguntarle uno tras otro:
«¿Soy yo acaso, Señor?».
Él respondió:
«El que ha metido conmigo la mano en la fuente, ese me va a entregar. El Hijo del hombre se va como está escrito de él; pero, ¡ay de aquel por quien el Hijo del hombre es entregado!, ¡más le valdría a ese hombre no haber nacido!».
Entonces preguntó Judas, el que lo iba a entregar:
«¿Soy yo acaso, Maestro?».
Él respondió:
«Tú lo has dicho».

Palabra del Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.




Benedicto XVI, Audiencia general 18-octubre-2006

Recordemos dos cosas. La primera:  Jesús respeta nuestra libertad. La segunda:  Jesús espera que queramos arrepentirnos y convertirnos; es rico en misericordia y perdón. Por lo demás, cuando pensamos en el papel negativo que desempeñó Judas, debemos enmarcarlo en el designio superior de Dios que guía los acontecimientos. Su traición llevó a la muerte de Jesús, quien transformó este tremendo suplicio en un espacio de amor salvífico y en entrega de sí mismo al Padre (cf. Ga 2, 20; Ef 5, 2. 25). El verbo "traicionar" es la versión de una palabra griega que significa "entregar". A veces su sujeto es incluso Dios en persona:  él mismo por amor "entregó" a Jesús por todos nosotros (cf. Rm 8, 32). En su misterioso plan de salvación, Dios asume el gesto injustificable de Judas como ocasión de la entrega total del Hijo por la redención del mundo.


LITURGIA DE LA EUCARISTÍA

Oración sobre las ofrendas

RECIBE, Señor, las ofrendas que te presentamos,
y muestra la eficacia de tu poder,
para que, al celebrar sacramentalmente la pasión de tu Hijo,
consigamos sus frutos saludables.
Por Jesucristo, nuestro Señor.


Prefacio II de la pasión del Señor
La victoria de la pasión
44. Este prefacio se dice el lunes, martes y miércoles de la Semana Santa.

En verdad es justo y necesario,
es nuestro deber y salvación
darte gracias
siempre y en todo lugar,
Señor, Padre santo,
Dios todopoderoso y eterno,
por Cristo, Señor nuestro.

Porque se acercan ya los días santos
de su pasión salvadora
y de su resurrección gloriosa;
en ellos celebramos su triunfo
sobre el poder de nuestro enemigo
y renovamos el misterio de nuestra redención.

Por eso,
los ángeles te cantan con júbilo eterno
y nosotros nos unimos a sus voces
cantando humildemente tu alabanza:

Santo, Santo, Santo...


Antífona de comunión Mt 20, 28

El Hijo del hombre no ha venido a ser servido, sino a servir y dar su vida en rescate por muchos.


Oración después de la comunión

DIOS todopoderoso,
concédenos sentir vivamente
que, por la muerte de tu Hijo en el tiempo
manifestada en estos santos misterios,
confiemos en que tú nos has dado la vida eterna.
Por Jesucristo, nuestro Señor.

Oración sobre el pueblo

Se puede añadir ad libitum

CONCEDE, Señor, a tus fieles
recibir pronto los sacramentos pascuales
y esperar, con vivo deseo, los dones futuros,
para que, perseverando
en los santos misterios que los hicieron renacer,
se sientan impulsados por ellos hacia una nueva vida.
Por Jesucristo, nuestro Señor. 


Pensamientos para el Evangelio de hoy

«Bendito seas tú, mi Señor Jesucristo, que anunciaste por adelantado tu muerte y, en la Última Cena, consagraste el pan material, convirtiéndolo en tu cuerpo glorioso, y por tu amor lo diste a los apóstoles como memorial de tu dignísima pasión, y les lavaste los pies con tus santas manos preciosas, mostrando así humildemente tu máxima humildad» (Santa Brígida).

«En los próximos días conmemoraremos el enfrentamiento supremo entre la Luz y las Tinieblas. También nosotros debemos situarnos en este contexto, conscientes de nuestra ‘noche’, de nuestras culpas y responsabilidades, si queremos revivir con provecho espiritual el Misterio Pascual» (Benedicto XVI).

«Jesús escogió el tiempo de la Pascua para realizar lo que había anunciado en Cafarnaúm: dar a sus discípulos su Cuerpo y su Sangre» (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 1.339).


No hay comentarios:

Publicar un comentario