31 de mayo - MARTES DE LA VII SEMANA DE PASCUA, VISITACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, fiesta



 
  MARTES DE LA VII SEMANA DE PASCUA,
  VISITACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA, fiesta
  Oficio de la fiesta, del Común de Santa María Virgen.
  (Liturgia de las Horas, Tomo II: Oficio de Lecturas Laudes - TerciaSexta   Nona Vísperas - Completas)
 


PROGRAMA PARROQUIAL:
MARTES, 31 DE MAYO

- Horario de la parroquia: abierta de 10.30 h. a 13.30 h. y de 17.00 h. a 20.00 h.

- Horario de despacho: de lunes a viernes, de 10.30 h. a 13.30 h y de 17.00 h. a 20.00 h.

- Rezo del Santo Rosario, (a las 20.00 h.), Mes de María (día 31) y Eucaristía de la Visitación de la Virgen, (a las 20,30 h.).




NOTICIAS DE ACTUALIDAD

 

Carta de Mons. Santiago Gómez Sierra, obispo de Huelva

Rosario por la paz junto al Papa Francisco

 El martes 31 de mayo, al concluir el mes de María, a las 18 horas, el Papa Francisco rezará el Rosario ante la imagen de María Reina de la Paz en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, pidiendo el fin de la guerra en Ucrania y de otras guerras activas en el mundo. Así el Santo Padre quiere ofrecer un signo de esperanza al mundo, que sufre profundamente herido por la violencia.

Además, los santuarios internacionales de todo el mundo participarán en esta oración y rezarán el Rosario al mismo tiempo. También, toda la Iglesia está invitada a unirse al Papa Francisco en esta oración a la Reina de la Paz.

Exhorto a las comunidades religiosas de la diócesis y a los párrocos a que inviten a los fieles a abrazar esta iniciativa del Santo Padre, convocándolos el mismo día y a la misma hora, ante la imagen de la Santísima Virgen que concite la mayor devoción, a rezar el Rosario, pidiendo por la paz en Ucrania y en todo el mundo.

Yo mismo me uniré al rezo de este Rosario desde el Santuario Nacional de la Virgen del Rocío, el martes 31 de mayo, a las 18 horas, celebrando a continuación la Eucaristía. 

+ Santiago Gómez,
obispo de Huelva
 

    Portada

El consistorio será el 27 de agosto y luego reflexionarán sobre la nueva constitución de la Curia

Francisco anuncia el nombramiento de 21 nuevos cardenales, entre ellos el español Fernando Vérgez

El autor de «Rebelión en la granja» y «1984» veía la realidad de lo que muere

George Orwell argumentó de forma contundente contra el aborto en una de sus primeras novelas

La oración de su familia y la intervención de la Virgen fueron decisivas para su recuperación

«Guerrero de Lourdes»: militar en Kosovo, adicto y sin fe, fue salvado por «un torrente de gracia»

Vídeos

  Lo que de verdad busca la Agenda 2030

  El Pentateuco de los samaritanos

  ¿Tendría algo sentido si no hubiera Dios?

  García-Gallardo: los dos minutos clave

  Nicaragua: el asalto comunista a la Iglesia

Otras noticias

  Lección del Papa en la fiesta de la Ascensión del Señor: «Rezar por los demás y bendecir sus vidas»

  Proyecto Infans no deja de crecer: ayuda a bebés de familias en apuros a través de las parroquias

  La Iglesia Ortodoxa Ucraniana del metropolita Onofre decide desvincularse del Patriarcado de Moscú

Opinión

  El cielo es nuestra meta , por Monseñor Demetrio Fernández

Blogs

  Hoy el reto del amor es dar gracias por tres detalles que el Señor te ha preparado en este día. , por El Reto Del Amor

  De Cristo en la tierra. Comentario para Matrimonios: Lucas 24, 46-53 , por ProyectoAmorConyugal.es

  Reflexión de la Ascensión del Señor , por La alegría de la Buena Noticia




SANTORAL DE HOY

Elogio: Fiesta de la Visitación de la Bienaventurada Virgen María, con motivo de su viaje al encuentro de su prima Isabel, que estaba embarazada de un hijo en su ancianidad, y a la que saludó. Al encontrarse gozosas las dos futuras madres, el Redentor que venía al mundo santificó a su precursor, que aún estaba en el seno de Isabel, y al responder María al saludo de su prima, exultante de gozo en el Espíritu Santo, glorificó a Dios con el cántico de alabanza del Magníficat.


Otros santos de este día:

Santa Petronila, virgen y mártir

En Roma, en el cementerio de Domitila, en la vía Ardeatina, santa Petronila, virgen y mártir.

San Hermias, mártir

Junto a Comana (Gumenek), en el Ponto, san Hermias, soldado y mártir.

Santos Cancio, Canciano y Cancianila, mártires

En Aquilea, en el territorio de Venecia, santos Cancio, Canciano y Cancianila, mártires, que, detenidos por el perseguidor mientras huían de la ciudad en un carromato, finalmente fueron condenados al suplicio.

San Silvio de Toulouse, obispo

En la población de Toulouse, en la Galia Narbonense, san Silvio, obispo, que comenzó la construcción de una basílica para instalar dignamente el sepulcro de san Saturnino.

Beato Jacobo Salomoni, religioso presbítero

En Forlí, en la Emilia, beato Jacobo Salomoni, presbítero, que, siendo aún adolescente, fallecido su padre e ingresada su madre en las monjas cistercienses, distribuyó sus bienes entre los pobres y entró en la Orden de Predicadores, donde resplandeció durante cuarenta y cinco años como amigo de los pobres y hombre de paz, dotado de insignes carismas.

Santa Bautista Varano, abadesa

En Camerino, en el Piceno, santa Bautista (Camila) Varano, abadesa del monasterio de Clarisas fundado por su mismo padre, donde experimentó grandes tribulaciones y también místicas consolaciones.

Beatos Roberto Thorpe y Tomás Watkinson, mártires

En York, en Inglaterra, beatos Roberto Thorpe, presbítero, y Tomás Watkinson, que fueron condenados a muerte en tiempo de la reina Isabel I, el primero por ser sacerdote y el segundo, padre de familia de edad avanzada, por haber prestado muchas veces ayuda a los sacerdotes. Ambos recibieron, a un mismo tiempo, la corona del martirio en el patíbulo.

Beato Nicolás Barré, presbítero y fundador

En París, en Francia, beato Nicolás Barré, presbítero, el cual, siendo maestro en teología y célebre educador de almas en el espíritu del Evangelio, instituyó en toda Francia las Escuelas Cristianas y de Caridad, así como el Instituto de Hermanas del Niño Jesús, para impartir educación gratuita a los hijos del pueblo.

San Félix Amoroso, religioso

En Nicosia, lugar de Sicilia, san Félix (Jacobo) Amoroso, religioso, que, tras haber sido rechazado durante diez años, finalmente ingresó en la Orden de los Hermanos Menores Capuchinos, donde desempeñó humildísimos oficios con sencillez e inocencia de corazón.

Beato Mariano de Roccacasale, religioso

En el pueblo de Bellegra, en los alrededores de Roma, beato Mariano de Roccacasale, religioso de la Orden de los Hermanos Menores, que, cumpliendo el oficio de portero, abrió la puerta del convento a los pobres y a los peregrinos, a quienes con suma caridad atendía en todo.

San Noé Mawaggali, mártir

En el lugar de Mityana, en Uganda, san Noé Mawaggali, mártir, que, siendo servidor del rey, iniciada la persecución rehusó impávido emprender la fuga y ofreció voluntariamente su pecho a las lanzas de los soldados, quienes, tras atravesárselo, lo colgaron de un árbol hasta que entregó el espíritu por Cristo.


LITURGIA DE HOY


DIRECTORIO SOBRE LA PIEDAD POPULAR Y LA LITURGIA

La novena de Pentecostés

155. La Escritura da testimonio de que en los nueve días entre la Ascensión y Pentecostés, los Apóstoles "permanecían unidos y eran asiduos en la oración, junto con algunas mujeres y con María, la Madre de Jesús, y con sus hermanos" (Hech 1, 14), en espera de ser "revestidos con el poder de lo alto" (Lc 24, 49). De la reflexión orante sobre este acontecimiento salvífico ha nacido el ejercicio de piedad de la novena de Pentecostés, muy difundido en el pueblo cristiano.

En realidad, en el Misal y en la Liturgia de las Horas, sobre todo en las Vísperas, esta "novena" ya está presente: los textos bíblicos y eucológicos se refieren, de diversos modos, a la espera del Paráclito. Por lo tanto, en la medida de lo posible, la novena de Pentecostés debería consistir en la celebración solemne de las Vísperas. Donde esto no sea posible, dispóngase la novena de Pentecostés de tal modo que refleje los temas litúrgicos de los días que van de la Ascensión a la Vigilia de Pentecostés.

En algunos lugares se celebra durante estos días la semana de oración por la unidad de los cristianos.


Fiesta de la Visitación de la Bienaventurada Virgen María, con motivo de su viaje al encuentro de su prima Isabel, que estaba embarazada de un hijo en su ancianidad, y a la que saludó. Al encontrarse gozosas las dos futuras madres, el Redentor que venía al mundo santificó a su precursor, que aún estaba en el seno de Isabel, y al responder María al saludo de su prima, exultante de gozo en el Espíritu Santo, glorificó a Dios con el cántico de alabanza del «Magníficat» (elog. del Martirologio Romano).

 

Misa de la fiesta (blanco).

MISAL: ants. y oracs. props., Gl., Pf. II de BVM. No se puede decir la PE IV.

LECC.: vol. IV.

- Sof 3, 14-18. El rey de Israel, el Señor, está en medio de ti.

o bien: Rom 12, 9-16b. Compartid las necesidades de los santos; practicad la hospitalidad.

- Salmo: Is 12, 2-6. R. Es grande en medio de ti el Santo de Israel.

- Lc 1, 39-56. ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?

 

Liturgia de las Horas: oficio de la fiesta. Te Deum.

Martirologio: elogs. del 1 de junio, pág. 341.

CALENDARIOS: Hospitalarias del Sagrado Corazón de Jesús: Nuestra Señora del Sagrado Corazón de Jesús (S).

Salesas: Visitación de la bienaventurada Virgen María (S).

 

Monición de entrada

Celebramos hoy la fiesta de la Visitación de la bienaventurada Virgen María, con motivo del encuentro con su prima santa Isabel, que estaba embarazada en su ancianidad. Al encontrarse gozosas las dos futuras madres, el Redentor que venía al mundo santificó a su precursor, Juan Bautista, que aún estaba en el seno de Isabel. Al responder María al saludo de su prima, exultante de gozo en el Espíritu Santo, glorificó a Dios con el cántico de alabanza del Magníficat.

 
Se dice Gloria.
 
Oración colecta
Dios todopoderoso y eterno,
que inspiraste a la Virgen María,
cuando llevaba en su seno a tu Hijo, visitar a Isabel,
concédenos que, dóciles al soplo del Espíritu,
podamos siempre cantar con ella tus maravillas.
Por nuestro Señor Jesucristo.


LECTURAS DE LA MISA

Audio y comentario del Evangelio de hoy


(Opción 1: fuera del tiempo pascual)

PRIMERA LECTURA
El rey de Israel, el Señor, está en medio de ti
 
Lectura de la profecía de Sofonías (So 3, 14-18)
 
ALÉGRATE, hija de Sión, grita de gozo, Israel,
regocíjate y disfruta con todo tu ser, hija de Jerusalén.
El Señor ha revocado tu sentencia,
ha expulsado a tu enemigo.
El rey de Israel, el Señor,
está en medio de ti,
no temas mal alguno.
Aquel día se dirá a Jerusalén:
«¡No temas! ¡Sión, no desfallezcas!».
El Señor, tu Dios, está en medio de ti,
valiente y salvador;
se alegra y se goza contigo,
te renueva con su amor;
exulta y se alegra contigo
como en día de fiesta.
Acabé con tu mal,
con el peso de tu oprobio.

Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.


(Opción 2: siempre en TP; puede usarse fuera de TP)

PRIMERA LECTURA 
Compartid las necesidades de los santos; practicad la hospitalidad

 

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (Rom 12, 9-16b)

 

HERMANOS:

Que vuestro amor no sea fingido; aborreciendo lo malo, apegaos a lo bueno.

Amaos cordialmente unos a otros; que cada cual estime a los otros más que a si mismo; en la actividad, no seáis negligentes; en el espíritu, manteneos fervorosos, sirviendo constantemente al Señor.

Que la esperanza os tenga alegres; manteneos firmes en la tribulación, sed asiduos en la oración; compartid las necesidades de los santos; practicad la hospitalidad.

Bendecid a los que os persiguen; bendecid, sí, no maldigáis.

Alegraos con los que están alegres; llorad con los que lloran.

Tened la misma consideración y trato unos con otros, sin pretensiones de grandeza, sino poniéndoos al nivel de la gente humilde.


Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL (Is 12, 2-3. 4bcd. 5-6 [R.: 6])
 

 
V. «El Señor es mi Dios y salvador:
confiaré y no temeré,
porque mi fuerza y mi poder es el Señor,
él fue mi salvación».
Y sacaréis aguas con gozo
de las fuentes de la salvación.
 
R. Es grande en medio de ti el Santo de Israel.
 
V. «Dad gracias al Señor,
invocad su nombre,
contad a los pueblos sus hazañas,
proclamad que su nombre es excelso».

R. Es grande en medio de ti el Santo de Israel.
 
V. Tañed para el Señor, que hizo proezas,
anunciadlas a toda la tierra;
gritad jubilosos, habitantes de Sión:
porque es grande medio de ti el Santo de Israel.
 
R. Es grande es en medio de ti el Santo de Israel.


Aleluya Cf. Lc 1, 45

R. Aleluya, aleluya, aleluya.
V. Bienaventurada tú, que has creído, Virgen María,
porque lo que te ha dicho el Señor se cumplirá. R.
 
 
EVANGELIO
¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor?
 
╬ Lectura del santo Evangelio según san Lucas (Lc 1, 39-56)
R. Gloria a ti, Señor.

EN AQUELLOS DÍAS, María se levantó y puso en camino de prisa hacia la montaña, a una ciudad de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel.

Aconteció que, en cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel del Espíritu Santo y, levantando la voz exclamó:

«¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? Pues, en cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Bienaventurada la que ha creído, porque lo que le ha dicho el Señor se cumplirá».

María dijo:

«Proclama mi alma la grandeza del Señor,
“se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humildad de su esclava”.

Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí:
“su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación”.

Él hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
“derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.

Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia”
-como lo había prometido a “nuestros padres”-
en favor de Abrahán y su descendencia por siempre».

María se quedó con Isabel unos tres meses y volvió a su casa.
 
Palabra del Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.

 

Del Papa Francisco, Ángelus 15-agosto-2015

El cántico de la Virgen nos deja también intuir el sentido cumplido de la historia de María: si la misericordia del Señor es el motor de la historia, entonces no podía «conocer la corrupción del sepulcro la mujer que, por obra del Espíritu, concibió en su seno al autor de la vida, Jesucristo» (Prefacio). Todo esto no tiene que ver sólo con María. Las «cosas grandes» hechas en Ella por el Todopoderoso nos tocan profundamente, nos hablan de nuestro viaje en la vida, nos recuerdan la meta que nos espera: la casa del Padre. Nuestra vida, vista a la luz de María asunta al Cielo, no es un deambular sin sentido, sino una peregrinación que, aun con todas sus incertidumbres y sufrimientos, tiene una meta segura: la casa de nuestro Padre, que nos espera con amor.


Pensamientos para el Evangelio de hoy

«Corazón Dulcísimo de María, da fuerza y seguridad a nuestro camino en la tierra: sé tú misma nuestro camino, porque tú conoces la senda y el atajo cierto que llevan, por tu amor, al amor de Jesucristo» (San Josemaría).

«En esta fiesta contemplamos a María. Ella nos abre a la esperanza, a un futuro lleno de alegría y nos enseña el camino para alcanzarlo: acoger en la fe a su Hijo; no perder nunca la amistad con Él, sino dejarnos iluminar y guiar por su Palabra» (Benedicto XVI).

«Sólo la fe puede adherir a las vías misteriosas de la omnipotencia de Dios. Esta fe se gloría de sus debilidades con el fin de atraer sobre sí el poder de Cristo. De esta fe, la Virgen María es el modelo supremo: ella creyó que ‘nada es imposible para Dios’ (Lc 1,37) y pudo proclamar las grandezas del Señor: ‘El Poderoso ha hecho en mi favor maravillas, Santo es su nombre’ (Lc 1,49)» (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 273).



30 de mayo - LUNES DE LA VII SEMANA DE PASCUA, feria, o SAN FERNANDO III (ML)

 



 
  LUNES DE LA VII SEMANA DE PASCUA, feria
  Oficio del Lunes de la III Semana del Salterio
  (Liturgia de las Horas, Tomo II: Oficio de Lecturas Laudes - TerciaSexta   Nona Vísperas - Completas)
 


PROGRAMA PARROQUIAL:
LUNES, 30 DE MAYO

- Horario de la parroquia: abierta de 10.30 h. a 13.30 h. y de 17.00 h. a 20.00 h.

- Horario de despacho: de lunes a viernes, de 10.30 h. a 13.30 h y de 17.00 h. a 20.00 h.

- Rezo del Santo Rosario y mes de María, en la Parroquia (a las 20.00 h.).

HOY NO TRANSMITIREMOS LA MISA. YA MAÑANA SÍ


    Portada

El consistorio será el 27 de agosto y luego reflexionarán sobre la nueva constitución de la Curia

Francisco anuncia el nombramiento de 21 nuevos cardenales, entre ellos el español Fernando Vérgez

El autor de «Rebelión en la granja» y «1984» veía la realidad de lo que muere

George Orwell argumentó de forma contundente contra el aborto en una de sus primeras novelas

La oración de su familia y la intervención de la Virgen fueron decisivas para su recuperación

«Guerrero de Lourdes»: militar en Kosovo, adicto y sin fe, fue salvado por «un torrente de gracia»

Vídeos

  Lo que de verdad busca la Agenda 2030

  El Pentateuco de los samaritanos

  ¿Tendría algo sentido si no hubiera Dios?

  García-Gallardo: los dos minutos clave

  Nicaragua: el asalto comunista a la Iglesia

Otras noticias

  Lección del Papa en la fiesta de la Ascensión del Señor: «Rezar por los demás y bendecir sus vidas»

  Proyecto Infans no deja de crecer: ayuda a bebés de familias en apuros a través de las parroquias

  La Iglesia Ortodoxa Ucraniana del metropolita Onofre decide desvincularse del Patriarcado de Moscú

Opinión

  El cielo es nuestra meta , por Monseñor Demetrio Fernández

Blogs

  Hoy el reto del amor es dar gracias por tres detalles que el Señor te ha preparado en este día. , por El Reto Del Amor

  De Cristo en la tierra. Comentario para Matrimonios: Lucas 24, 46-53 , por ProyectoAmorConyugal.es

  Reflexión de la Ascensión del Señor , por La alegría de la Buena Noticia



SANTORAL DE HOY

Elogio: San Fernando III, rey de Castilla y de León, que fue prudente en el gobierno del reino, protector de las artes y las ciencias, y diligente en propagar la fe. Descansó finalmente en la ciudad de Sevilla.

Patronazgos: patrono de Aranjuez, Sevilla (en España) y San Fernando (en Venezuela), también del Cuerpo de Ingenieros Militares en España, protector de los pobres y los presos.

Refieren a este santo: Beato Pedro González «Telmo».

Oración

Oh Dios, que elegiste al rey san Fernando como defensor de tu Iglesia en la tierra, escucha las súplicas de tu pueblo que te pide tenerlo como protector en el cielo. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios por los siglos de los siglos. Amén (oración litúrgica).


Otros santos de este día:

San Gabino, mártir

En Porto Torres, de Cerdeña, san Gabino, mártir.

Santos Basilio y Emelia, matrimonio

En Cesarea de Capadocia, santos Basilio y Emelia, que fueron padres de los santos obispos Basilio Magno, Gregorio de Nisa y Pedro de Sebaste, y de santa Macrina, virgen. Estos santos esposos, desterrados de su ciudad en tiempo del emperador Galerio Maximiano, habitaron en las soledades del Ponto, y después de la persecución reposaron en paz, tras dejar a sus hijos como herederos de sus virtudes.

San Anastasio de Pavia, obispo

En Pavía, ciudad de Lombardía, san Anastasio, obispo, el cual, habiendo abandonado la herejía arriana, profesó firmemente la fe católica.

Santa Dimpna, virgen y mártir

En Gehele, de Brabante, en Austrasia, santa Dimpna, virgen y mártir.

San Huberto de Tongres y Maastricht, obispo

En Tervueren, también en Brabante, en Austrasia, tránsito de san Huberto, obispo de Tongres y Maastricht, discípulo y sucesor de san Lamberto, que se dedicó con todas sus fuerzas a la difusión del Evangelio por Brabante y las Ardenas, donde terminó con las costumbres paganas.

Santa Juana de Arco, virgen

En Rouen, en la región de Normandía, en Francia, santa Juana de Arco, virgen, conocida como la doncella de Orleans, que después de luchar firmemente por su patria, al final fue entregada al poder de los enemigos, quienes la condenaron en un juicio injusto a ser quemada en la hoguera.

San Lucas Kirby y tres beatos compañeros, presbíteros y mártires

En Londres, en Inglaterra, san Lucas Kirby, presbítero y mártir, que en la persecución durante el reinado de Isabel I fue colgado en la triple horca de Tyburn después de muchos tormentos. Con él padecieron el suplicio en el mismo patíbulo los beatos presbíteros y mártires Guillermo Filby y Lorenzo Johnson, así como Tomás Cottam, de la Compañía de Jesús.

Beatos Guillermo Scott y Ricardo Newport, presbíteros y mártires

En la misma ciudad y treinta años después, reinando Jacobo I, beatos Guillermo Scott, de la Orden de San Benito, y Ricardo Newport, presbíteros y mártires, que por ser sacerdotes fueron estrangulados, aunque el segundo, como aún respiraba al terminar el suplicio, fue rematado a espada y descuartizado.

San Matías Kalemba, mártir

En Kampala, en Uganda, san Matías Kalemba, de sobrenombre «Mulumba» o «el Fuerte», mártir, que, tras abandonar el culto mahometano, recibió el bautismo en Cristo y, renunciando al cargo de juez, se dedicó con tesón a propagar la fe cristiana, por lo cual, en tiempo del rey Mwanga, fue sometido a torturas y, privado de todo consuelo, entregó finalmente su espíritu a Dios.

San José Marello, obispo y fundador

En Savona, en Italia, tránsito de san José Marello, obispo de Acqui, en la región del Piamonte, que fundó la Congregación de Oblatos de San José, dedicada a la formación moral y cristiana de la juventud.

Beata María Celina de la Presentación, virgen

En Burdeos, Francia, beata María Celina de la Presentación (Jeanne Germaine Castang), virgen.

Beata Marta María Wiecka, virgen

En Sniatyn, Ucrania, beata Marta María Wiecka, virgen.

Beato Otón Neururer, presbítero y mártir

En el campo de concentración de Buchenwald, en la región de Turingia, en Alemania, pasión del beato Otón Neururer, presbítero y mártir, que, por haber convencido a una joven católica para que no simulase la celebración del matrimonio con un partidario, ya casado, del régimen hostil a Dios y a los hombres, fue encerrado en la cárcel, donde, a pesar de todo, continuó clandestinamente con su ministerio entre todo tipo de tribulaciones, hasta que consumó el martirio al ser colgado por los pies cabeza abajo.


LITURGIA DE HOY


DIRECTORIO SOBRE LA PIEDAD POPULAR Y LA LITURGIA

La novena de Pentecostés

155. La Escritura da testimonio de que en los nueve días entre la Ascensión y Pentecostés, los Apóstoles "permanecían unidos y eran asiduos en la oración, junto con algunas mujeres y con María, la Madre de Jesús, y con sus hermanos" (Hech 1, 14), en espera de ser "revestidos con el poder de lo alto" (Lc 24, 49). De la reflexión orante sobre este acontecimiento salvífico ha nacido el ejercicio de piedad de la novena de Pentecostés, muy difundido en el pueblo cristiano.

En realidad, en el Misal y en la Liturgia de las Horas, sobre todo en las Vísperas, esta "novena" ya está presente: los textos bíblicos y eucológicos se refieren, de diversos modos, a la espera del Paráclito. Por lo tanto, en la medida de lo posible, la novena de Pentecostés debería consistir en la celebración solemne de las Vísperas. Donde esto no sea posible, dispóngase la novena de Pentecostés de tal modo que refleje los temas litúrgicos de los días que van de la Ascensión a la Vigilia de Pentecostés.

En algunos lugares se celebra durante estos días la semana de oración por la unidad de los cristianos.

Misa de feria o de la memoria (blanco).

MISAL: para la feria ants. y oracs. props. / para la memoria 1.ª orac. prop. y el resto del común de santos (para un santo) o de la feria; Pf. Pasc., de la Ascensión, después de la Ascensión o de la memoria.

LECC.: vol. II.

- Hch 19, 1-8. ¿Recibisteis el Espíritu Santo al aceptar la fe?
- Sal 67. R. Reyes de la tierra, cantad a Dios.
- Jn 16, 29-33. Tened valor: yo he vencido al mundo.

o bien: cf. vol. IV.

Liturgia de las Horas: oficio de feria o de la memoria.

Martirologio: elogs. del 31 de mayo, pág. 339.

CALENDARIOS: Arzobispado Castrense-Armas de Ingenieros y Transmisiones; Cuerpo de Ingenieros Politécnicos (Construcción, Telecomunicaciones y Electrónica de las Escalas de Oficiales y Técnica): San Fernando (S). Burgos-ciudad, Córdoba-ciudad, Segovia y Sevilla: (F). Burgos-diócesis, Cartagena, Córdoba-diócesis, Jaén y León: (MO). Zamora: (ML).
Hijas de María Madre de la Iglesia: Beata Matilde Téllez (F). Plasencia: (ML).
Hospitalarias del Sagrado Corazón: Visitación de la bienaventurada Virgen María (F).
Servitas: Beato Santiago Felipe Bertoni, presbítero (MO).
Barcelona, Sant Feliu de Llobregat, Terrassa y Vic: Beato Pedro Tarrés, presbítero (ML).
Dominicos: Beato Santiago Salomoni, presbítero (ML).
II Franciscanos: Beata Bautista Varano, virgen (ML).
OFM: Beato Mariano de Roccasale, religioso (ML).
Paúles e Hijas de la Caridad: Beata Marta María Wiecka, virgen (ML).


Antífona de entrada Hch 1, 8
Recibiréis la fuerza del Espíritu Santo que va a venir sobre vosotros, y seréis mis testigos hasta el confín de la tierra. Aleluya.

Oración colecta

Llegue a nosotros, Señor, la fuerza del Espíritu Santo,
para que podamos cumplir fielmente tu voluntad
y demos testimonio con una conducta santa.
Por nuestro Señor Jesucristo.


En la memoria:
30 de mayo
San Fernando

Oración colecta propia. El resto de la feria de Pascua.

Monición de entrada

Conmemoramos hoy a san Fernando III, rey de León y de Castilla, nacido a finales del siglo XII cerca de Valparaíso (Zamora). Es el rey de la reconquista del sur de España; en los territorios conquistados por él jamás hubo vencidos. Con razón es proclamado «señor de la convivencia de cristianos, musulmanes y judíos». Fue prudente en el gobierno del reino, protector de las artes y las ciencias, y diligente en propagar la fe. El año 1252 murió en la ciudad de Sevilla, llorado por todos. En la catedral hispalense reposan sus reliquias.


Oración colecta

Oh, Dios, que elegiste al rey san Fernando
como defensor de tu Iglesia en la tierra,
escucha las súplicas de tu pueblo
que te pide tenerlo como protector en el cielo.
Por nuestro Señor Jesucristo.


LECTURAS DE LA MISA

Audio y comentario del Evangelio de hoy (I)

Audio y comentario del Evangelio de hoy (II)


PRIMERA LECTURA
¿Recibisteis el Espíritu Santo al aceptar la fe?

 Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles (Hch 19, 1-8)

MIENTRAS Apolo estaba en Corinto, Pablo atravesó la meseta y llegó a Éfeso. Allí encontró unos discípulos y les preguntó:

«¿Recibisteis el Espíritu Santo al aceptar la fe?».

    Contestaron:

«Ni siquiera hemos oído hablar de un Espíritu Santo».

    Él les dijo:

«Entonces, ¿qué bautismo habéis recibido?».

    Respondieron:

«El bautismo de Juan».

    Pablo les dijo:

«Juan bautizó con un bautismo de conversión, diciendo al pueblo que creyesen en el que iba a venir después de él, es decir, en Jesús».

    Al oír esto, se bautizaron en el nombre del Señor Jesús; cuando Pablo les impuso las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo, y se pusieron a hablar en lenguas extrañas y a profetizar. Eran en total unos doce hombres.

    Pablo fue a la sinagoga y durante tres meses hablaba con toda libertad del reino de Dios, dialogando con ellos y tratando de persuadirlos.


Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.

 
SALMO RESPONSORIAL (Sal 67, 2-3. 4-5ac. 6-7ab ,[R.: 33a])

R. Reyes de la tierra, cantad a Dios.
 

O bien: Aleluya.

V. Se levanta Dios, y se dispersan sus enemigos,
huyen de su presencia los que lo odian;
como el humo se disipa, se disipan ellos;
como se derrite la cera ante el fuego,
así perecen los impíos ante Dios.
 
R. Reyes de la tierra, cantad a Dios.
 
V. En cambio, los justos se alegran,
gozan en la presencia de Dios,
rebosando de alegría.
Cantad a Dios, tocad a su nombre;
su nombre es el Señor.
 
R. Reyes de la tierra, cantad a Dios.
 
V. Padre de huérfanos, protector de viudas,
Dios vive en su santa morada.
Dios prepara casa a los desvalidos,
libera a los cautivos y los enriquece.
 
R. Reyes de la tierra, cantad a Dios.
 
 
Aleluya Col 3, 1
R. Aleluya, aleluya, aleluya.
V. Si habéis resucitado con Cristo, buscad los bienes de allá arriba,
donde Cristo está sentado a la derecha de Dios. R.
  
 
EVANGELIO
Tened valor: yo he vencido al mundo

 
╬ Lectura del santo Evangelio según san Juan (Jn 16, 29-33)
R. Gloria a ti, Señor. 

EN AQUEL TIEMPO, los discípulos dijeron a Jesús:

«Ahora sí que hablas claro y no usas comparaciones. Ahora vemos que lo sabes todo y no necesitas que te pregunten; por ello creemos que has salido de Dios».

    Les contestó Jesús:

«¿Ahora creéis? Pues mirad: está para llegar la hora, mejor, ya ha llegado, en que os disperséis cada cual por su lado y a mí me dejéis solo. Pero no estoy solo, porque está conmigo el Padre. Os he hablado de esto, para que encontréis la paz en mí. En el mundo tendréis luchas; pero tened valor: yo he vencido al mundo».


Palabra del Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.

San Agustín, in Ioannem, tract., 103

Recibido el Espíritu Santo, adquirieron confianza, y vencieron, no sólo en Él, pues no hubiera vencido Éste al mundo si el mundo hubiera vencido a sus miembros. Cuando dice: "Os he dicho esto para que tengáis paz en mí", debemos entender que no sólo se refiere a lo que había dicho poco antes, sino a todo lo que dijo desde que empezó a tener discípulos. O bien a aquel largo y admirable sermón que les predicó después de la cena. Esta recomendación de que tuviesen paz en Él, no tendrá fin, sino que será el fin de todas nuestras intenciones y obras.


Pensamientos para el Evangelio de hoy

«Durante todo este tiempo que media entre la resurrección del Señor y su ascensión, la providencia de Dios se ocupó en demostrar, insinuándose en los ojos y en el corazón de los suyos, que la resurrección del Señor Jesucristo era tan real como su nacimiento, pasión y muerte» (San León Magno).

«Aquí nos interesa destacar el secreto de la insondable alegría que Jesús lleva dentro de sí y que le es propia. Si Jesús irradia esa paz, esa seguridad, esa alegría, esa disponibilidad, se debe al amor inefable con que se sabe amado por su Padre» (San Pablo VI).

«(…) La virtud de la fortaleza hace capaz de vencer el temor, incluso a la muerte, y de hacer frente a las pruebas y a las persecuciones. Capacita para ir hasta la renuncia y el sacrificio de la propia vida por defender una causa justa. (...) ‘En el mundo tendréis tribulación. Pero ¡ánimo!: Yo he vencido al mundo’ (Jn 16,33)» (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 1.808).