- Horario de la parroquia: abierta de 10.30 h. a 13.30 h. y de 17.00 h. a 20.00 h.
- Horario de despacho: de lunes a viernes, de 10.30 h. a 13.30 h y de 17.00 h. a 20.00 h.
- Rezo del Santo Rosario y mes de María, en la Parroquia (a las 20.00 h.).
SANTORAL DE HOY
Otros santos de este día:
Santos Lucio, Montano, Juliano, Victorico, Víctor y Donaciano, mártires
En Cartago, santos Lucio, Montano, Juliano, Victorico, Víctor y Donaciano, mártires, que, en tiempo del emperador Valeriano, consumaron el martirio por confesar la religión y la fe que habían aprendido por enseñanza de san Cipriano.
Santos Mártires de Capadocia, mártires
Conmemoración de los santos mártires de Capadocia, a quienes, durante la persecución bajo el emperador Maximiano, mataron quebrándoles las piernas.
Santos Mártires de Mesopotamia, mártires
También conmemoración de los santos mártires de Mesopotamia, que en la misma época, colgados por los pies cabeza abajo, murieron ahogados por el humo y consumidos a fuego lento.
San Efebo de Nápoles, obispo
En Nápoles, en la Campania, san Efebo, obispo, que gobernó santamente al pueblo de Dios y le sirvió con fidelidad.
San Desiderio de Langres, obispo y mártir
En Langres, en la Galia Lugdunense, martirio de san Desiderio, obispo, de quien se narra que viendo a su grey oprimida por los vándalos, se dirigió a su rey para suplicar por ella, pero por orden del monarca fue condenado a muerte, ofreciéndose así, libremente, por las ovejas que le habían sido confiadas.
San Eutiquio de Norcia, abad
En el territorio de Norcia, en la Umbría, conmemoración de san Eutiquio, abad, que, según narra el papa san Gregorio Magno, primero llevó vida solitaria con san Florencio, procurando conducir a muchos hacia Dios a través de la exhortación, y luego gobernó santamente un monasterio cercano.
San Spes, abad
Igualmente en Norcia, san Spes, abad, que durante cuarenta años soportó la ceguera con admirable paciencia.
San Honorato, abad
En Subiaco, en el Lacio, conmemoración de san Honorato, abad, que gobernó sabiamente el monasterio donde antes había vivido san Benito.
San Siagrio de Niza, obispo
En Niza, en la Provenza, san Siagrio, obispo, que edificó un monasterio sobre el sepulcro de san Poncio.
San Miguel de Sinnada, obispo y confesor
En Sinnada (Çifitkasaba), lugar de Frigia, san Miguel, obispo, hombre pacífico, que favoreció la paz y la concordia entre griegos y latinos, pero enviado al exilio por defender el culto de las imágenes sagradas, murió lejos de su patria.
San Guiberto, monje
Cerca de Gemboux, en la comarca de Lieja, en Lotaringia, sepultura de san Guiberto, monje, que, habiendo abandonado sus insignias militares y abrazado la disciplina de la vida monástica, construyó un cenobio en un terreno de su heredad, retirándose después al monasterio de Gorze.
San Juan Bautista de Rossi, presbítero
En Roma, san Juan Bautista de Rossi, presbítero, que atendió en la Ciudad Santa a los pobres y a los más marginados, instruyendo a todos en la santa doctrina.
Beatos José Kurzawa y Vicente Matuszewski, presbíteros y mártires
En la ciudad de Witowo, en Polonia, beatos José Kurzawa y Vicente Matuszewski, presbíteros y mártires, asesinados por los perseguidores de la Iglesia cuando, en tiempo de guerra, su patria estuvo sometida por la fuerza a un poder extranjero.
Beata María Gargani, fundadora
LITURGIA DE HOY
MISAL: ants. y oracs. props., Pf. Pasc.
LECC.: vol. II.
- Hch 16, 11-15. El Señor le abrió el corazón para que aceptara lo
que decía Pablo.
- Sal 149. R. El Señor ama a su pueblo.
- Jn 15, 26 — 16, 4a. El Espíritu de la verdad dará testimonio
de mí.
Liturgia
de las Horas: oficio de feria.
Martirologio: elogs. del 24 de mayo, pág. 325.
CALENDARIOS: Hermanas Carmelitas de la Caridad Vedruna: Santa
Joaquina Vedruna, religiosa (S-trasladada).
Barcelona, Tarragona y Vic: Santa Rita de Casia, religiosa (ML).
Osma-Soria: Beato Julián de San Agustín, religioso (ML).
Orden de San Juan de Jerusalén: Beato Guillermo Apor, obispo y
mártir (ML).
Paúles e Hijas de la Caridad: Santa Juana Antida Thouret, virgen
(ML).
Antífona de entrada Rom 6, 9
Cristo, una vez resucitado de entre los muertos,
ya no muere más; la muerte ya no tiene dominio sobre él. Aleluya.
Dios misericordioso, concédenos recibir
como fruto abundante en toda nuestra vida
lo que realizamos en las celebraciones pascuales.
Por nuestro Señor Jesucristo.
Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles
(Hch 16, 11-15)
NOS HICIMOS a la mar en Tróade y pusimos rumbo hacia Samotracia; al día
siguiente salimos para Neápolis y de allí para Filipos, primera ciudad del
distrito de Macedonia y colonia romana. Allí nos detuvimos unos días.
El sábado salimos de la ciudad y fuimos a un sitio junto al río, donde
pensábamos que había un lugar de oración; nos sentamos y trabamos conversación
con las mujeres que habían acudido. Una de ellas, que se llamaba Lidia, natural
de Tiatira, vendedora de púrpura, que adoraba al verdadero Dios, estaba
escuchando; y el Señor le abrió el corazón para que aceptara lo que decía
Pablo.
Se bautizó con toda su familia y nos invitó:
«Si estáis convencidos de que creo en el Señor, venid a hospedaros en mi casa».
Y nos obligó a aceptar.
Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.
SALMO RESPONSORIAL (Sal 149, 1bc-2. 3-4. 5-6a y 9b (R.: 4a])
V. Cantad al Señor un cántico nuevo,
resuene su alabanza en la asamblea de los fieles;
que se alegre Israel por su Creador,
los hijos de Sión por su Rey.
R. El Señor ama a su pueblo.
V. Alabad su nombre con danzas,
cantadle con tambores y cítaras;
porque el Señor ama a su pueblo
y adorna con la victoria a los humildes.
R. El Señor ama a su pueblo.
V. Que los fieles festejen su gloria
y canten jubilosos en filas:
con vítores a Dios en la boca.
Es un honor para todos sus fieles.
R. El Señor ama a su pueblo.
╬ Lectura del santo Evangelio según san Juan
(Jn 15, 26-16, 4a)
R. Gloria a ti, Señor.
EN AQUEL TIEMPO, dijo Jesús a sus discípulos:
«Cuando venga el Paráclito, que os enviaré desde el Padre, el Espíritu de la
verdad, que procede del Padre, él dará testimonio de mí; y también vosotros
daréis testimonio, porque desde el principio estáis conmigo.
Os he hablado de esto, para que no os escandalicéis. Os excomulgarán de la
sinagoga; más aún, llegará incluso una hora cuando el que os dé muerte pensará
que da culto a Dios. Y esto lo harán porque no han conocido ni al Padre ni a
mí.
Os he hablado de esto para que, cuando llegue la hora, os acordéis de que yo os
lo había dicho».
Palabra del Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.
Papa Francisco, Audiencia general
15-mayo-2013
Queridos hermanos y hermanas, necesitamos
dejarnos inundar por la luz del Espíritu Santo, para que Él nos introduzca en
la Verdad de Dios, que es el único Señor de nuestra vida. (...) preguntémonos
si hemos dado concretamente algún paso para conocer más a Cristo y las verdades
de la fe, leyendo y meditando la Sagrada Escritura, estudiando el Catecismo,
acercándonos con constancia a los Sacramentos. Preguntémonos al mismo tiempo
qué pasos estamos dando para que la fe oriente toda nuestra existencia. No se es
cristiano a "tiempo parcial", sólo en algunos momentos, en algunas
circunstancias, en algunas opciones. No se puede ser cristianos de este modo,
se es cristiano en todo momento. ¡Totalmente! La verdad de Cristo, que el
Espíritu Santo nos enseña y nos dona, atañe para siempre y totalmente nuestra
vida cotidiana. Invoquémosle con más frecuencia para que nos guíe por el camino
de los discípulos de Cristo. Invoquémosle todos los días. Os hago esta
propuesta: invoquemos todos los días al Espíritu Santo, así el Espíritu Santo
nos acercará a Jesucristo.
Pensamientos para el Evangelio de hoy
«Y así como la virtud de la santa humanidad de Cristo hace que formen un mismo cuerpo todos aquellos en quienes ella se encuentra, pienso que de la misma manera el Espíritu de Dios que habita en todos, único e indivisible, los reduce a todos a la unidad espiritual» (San Cirilo de Alejandría).
«Pidan al Señor la gracia de recibir el Espíritu Santo que nos hará recordar las cosas de Jesús, que nos guiará a toda la verdad y nos preparará cada día para dar testimonio, según la voluntad del Señor» (Francisco).
«Jesucristo, habiendo entrado una vez por todas en el santuario del cielo, intercede sin cesar por nosotros como el mediador que nos asegura permanentemente la efusión del Espíritu Santo» (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 667)
No hay comentarios:
Publicar un comentario