27 de octubre - JUEVES DE LA XXX SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO, Feria



  JUEVES DE LA XXX SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO, feria
  Oficio del Jueves de la Semana II del Salterio
  (Liturgia de las Horas, Tomo IV: Oficio de Lecturas Laudes - TerciaSexta     Nona Vísperas - Completas)
 


El Tweet del Papa:


SANTORAL DE HOY

Elogio: En Roma, san Evaristo, papa, que fue el cuarto sucesor de san Pedro y rigió la Iglesia romana en tiempo del emperador Trajano.

Otros santos de este día:

   San Trásea de Eumenia , obispo y mártir  

En Esmirna, en Asia, san Trásea, obispo de Eumenia de Frigia y mártir.

   San Namancio de Auvernia, obispo  

En Auvernia, de Aquitania, san Namancio, obispo, que construyó la iglesia catedral.

   San Gaudioso de Abitinia, monje y obispo  

En Nápoles, de la Campania, sepultura de san Gaudioso, obispo, el cual, a causa de la persecución de los vándalos, pasó de Abitinia a Campania, y terminó sus días en la paz de un monasterio.

   San Oterano, monje 

En la isla de Iona, en Escocia, san Oterano, monje, que fue uno de los primeros discípulos de san Columba.

   Beato Bartolomé de Breganza, religioso y obispo  

En Vicenza, en la región de Venecia, conmemoración de san Bartolomé de Breganza, obispo, de la Orden de Predicadores, que fundó en esta ciudad la Milicia de Jesucristo, para defender la fe católica y la libertad de la Iglesia.

   Beato Salvador Mollar Ventura, religioso y mártir  

En Paterna, en la región española de Valencia, beato Salvador Mollar Ventura, religioso de la Orden de los Hermanos Menores y mártir, que, en tiempo de persecución contra la fe. fue discípulo fiel, redimido por la sangre de Cristo.


LITURGIA DE HOY

Misa de feria (verde).

MISAL: cualquier formulario permitido (véase pág. 67, n. 5), Pf. común.

LECC.: vol. III-par.

- Ef 6, 10-20. Tomad las armas de Dios para poder manteneros firmes después de haber superado todas las pruebas.
- Sal 143. R. ¡Bendito el Señor, mi alcázar!
- Lc 13, 31-35. No cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén.

Liturgia de las Horas: oficio de feria.

Martirologio: elogs. del 28 de octubre, pág. 636.

CALENDARIOS: Ávila-ciudad: Santos Vicente, Sabina y Cristeta, mártires (S). Ávila-diócesis y Toledo: (MO). Burgos: (ML).
Clérigos Regulares de Somasca: Santa Teresa Eustochio Verzeri (ML).
Dominicos: Beato Bartolomé de Vicenza, obispo (ML).
HH. de Belén: Conmemoración de los difuntos de la Orden.

 

Misa votiva:
De nuestro Señor Jesucristo, sumo y eterno Sacerdote
Esta misa se dice con vestiduras de color blanco.


Antífona de entrada Sal 109, 4

El Señor lo ha jurado y no se arrepiente: «Tú eres sacerdote eterno según el rito de Melquisedec».

Monición de entrada

El sacerdote, en su entrega y servicio a Dios y a la Iglesia, es mediador entre Dios y los hombres. Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre, ha ejercido esta mediación sacerdotal de forma plena y perfecta, a través de su vida y, sobre todo, en su muerte y resurrección. A través de los tiempos, la Iglesia actualiza en el sacramento del orden, este único e irrepetible sacerdocio de Cristo.


Oración colecta

Oh, Dios, que para gloria de tu nombre y salvación del género humano quisiste constituir a Cristo sumo y eterno sacerdote, te suplicamos que el pueblo, adquirido para ti con su sangre, consiga, por la participación en este memorial, la fuerza de su cruz y Resurrección. Por nuestro Señor Jesucristo.


LECTURAS DE LA MISA

Audio y comentario del Evangelio de hoy


PRIMERA LECTURA
Tomad las armas de Dios para poder manteneros firmes
después de haber superado todas las pruebas

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (Ef 6, 10-20)

HERMANOS:
Buscad vuestra fuerza en el Señor y en su invencible poder. Poneos las armas de Dios, para poder afrontar las asechanzas del diablo, porque nuestra lucha no es contra hombres de carne y hueso sino contra los principados, contra las potestades, contra los dominadores de este mundo de tinieblas, contra los espíritus malignos del aire.
Por eso, tomad las armas de Dios para poder resistir en el día malo y manteneros firmes después de haber superado todas las pruebas. Estad firmes; ceñid la cintura con la verdad, y revestid la coraza de la justicia; calzad los pies con la prontitud para el evangelio de la paz. Embrazad el escudo de la fe, donde se apagarán las flechas incendiarias del maligno. Poneos el casco de la salvación y empuñad la espada del
Espíritu que es la palabra de Dios.
Siempre en oración y súplica, orad en toda ocasión en el Espíritu, velando juntos con constancia, y suplicando por todos los santos. Pedid también por mí, para que cuando abra mi boca, se me conceda el don de la palabra, y anuncie con valentía el misterio del Evangelio, del que soy embajador en cadenas, y tenga valor para hablar de él como debo.

Palabra de Dios.
R. Te alabamos, Señor.


SALMO RESPONSORIAL (Sal 143, 1bcd. 2. 9-10 [R.: cf. 1a)

R. ¡Bendito el Señor, mi alcázar!

V. Bendito el Señor, mi Roca,
que adiestra mis manos para el combate,
mis dedos para la pelea.

R. ¡Bendito el Señor, mi alcázar!

V. Mi bienhechor, mi alcázar,
baluarte donde me pongo a salvo,
mi escudo y refugio,
que me somete los pueblos.

R. ¡Bendito el Señor, mi alcázar!

V. Dios mío, te cantaré un cántico nuevo,
tocaré para ti el arpa de diez cuerdas:
para ti que das la victoria a los reyes,
y salvas a David, tu siervo, de la espada maligna.

R. ¡Bendito el Señor, mi alcázar!


Aleluya Lc 19, 38

R. Aleluya, aleluya, aleluya.
V. Bendito el rey que viene en nombre del Señor;
paz en el cielo y gloria en las alturas. R.


EVANGELIO
No cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén

╬ Lectura del santo Evangelio según san Lucas (Lc 13, 31-35)
R. Gloria a ti, Señor.

En aquel día, se acercaron unos fariseos a decir a Jesús:
«Sal y marcha de aquí, porque Herodes quiere matarte». Jesús les dijo:
«Id y decid a ese zorro: “Mira, yo arrojo demonios y realizo curaciones hoy y mañana, y al tercer día mi obra quedará consumada.
Pero es necesario que camine hoy y mañana y pasado, porque no cabe que un profeta muera fuera de Jerusalén”.
¡Jerusalén, Jerusalén, que matas a los profetas y apedreas a los que se te envían!
Cuántas veces he querido reunir a tus hijos, como la gallina reúne a sus polluelos bajo las alas, y no habéis querido.
Mirad, vuestra casa va a ser abandonada.
Os digo que no me veréis hasta el día en que digáis: “¡Bendito el que viene en nombre del Señor!”».

Palabra del Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.


Papa Francisco, Homilía en santa Marta 31-octubre-2019.

El amor de Cristo lo lleva al llanto, al llanto por cada uno de nosotros. ¡La ternura que hay en esa expresión! Jesús podía condenar a Jerusalén, decir cosas feas… Y se lamenta porque no se deja amar como los polluelos de la gallina. La ternura del amor de Dios en Jesús. Y eso lo entendió Pablo. Si no llegamos a sentir, a entender la ternura del amor de Dios en Jesús por cada uno, nunca jamás podremos comprender qué es el amor de Cristo. Es un amor así, espera siempre, paciente, el amor que juega esa última carta con Judas: "Amigo", le da una vía de escape, hasta el final. También con los grandes pecadores, hasta el final los ama con esa ternura. No sé si pensamos en Jesús tan tierno, en Jesús que llora, como lloró ante la tumba de Lázaro, como lloró aquí, viendo Jerusalén.

Preguntémonos si Jesús llora por nosotros, Él que nos ha dado tantas cosas mientras nosotros a menudo elegimos ir por otro camino. El amor de Dios se hace lágrima, se hace llanto, llanto de ternura en Jesús. Por eso, San Pablo se había enamorado de Cristo y nada podía separarlo de Él.


Pensamientos para el Evangelio de hoy

«Dios te pide la fe, no desea tu muerte; tiene sed de tu entrega, no de tu sangre; se aplaca, no con tu muerte; sino con tu buena voluntad» (San Pedro Crisólogo).

«Jerusalén es la esposa, es la novia del Señor: ¡la quería mucho! Pero no se da cuenta de las visitas del Señor y hace llorar al Señor. Jerusalén cae por distracción, por no recibir al Señor que viene a salvarla» (Francisco).

«Jesús anunció (…) en el umbral de su Pasión la ruina de ese espléndido edificio del cual no quedará piedra sobre piedra. Hay aquí un anuncio de una señal de los últimos tiempos que se van a abrir con su propia Pascua (…)» (Catecismo de la Iglesia Católica, nº 585).


No hay comentarios:

Publicar un comentario