PROGRAMA PARROQUIAL:
LUNES, 15 DE NOVIEMBRE
- Horario de la
parroquia: abierta de 10.00 h. a 13.30 h. y de 17.00 h. a 21.00 h.
- Horario de
despacho: de lunes a viernes, de 10.30 h. a 13.30 h y de 17.00 h. a 20.00 h.
- Rezo del Santo
Rosario (a las 19.00 h.)
HOY LUNES, MAÑANA Y PASADO NO
TENDREMOS LA MISA. YA EL JUEVES SÍ
NOTICIAS DE ACTUALIDAD
SANTORAL DE HOY
Elogio: San Alberto, llamado «Magno», obispo y doctor de la Iglesia, que ingresó en la Orden de Predicadores en París, enseñó de palabra y en sus escritos las disciplinas filosóficas y divinas, y fue maestro de santo Tomás de Aquino, uniendo maravillosamente la sabiduría de los santos con la ciencias humanas y naturales. Después se vio obligado a aceptar la sede episcopal de Ratisbona, desde la cual se esforzó asiduamente en fortalecer la paz entre los pueblos, aunque al cabo de un año prefirió la pobreza de la Orden a toda clase de honores, y murió santamente en Colonia, en la Lotaringia Germánica.
Patronazgos: patrono de teólogos, filósofos, técnicos médicos, científicos de ciencias exactas y naturales, estudiantes, escolares, mineros.
Refieren a este santo: Beato Ambrosio Sansedoni, Beato Inocencio V, Beato Jordán de Sajonia, Beato Juan de Vercelli, Santo Tomás de Aquino.
Elogio: San Alberto, llamado «Magno», obispo y doctor de la Iglesia, que ingresó en la Orden de Predicadores en París, enseñó de palabra y en sus escritos las disciplinas filosóficas y divinas, y fue maestro de santo Tomás de Aquino, uniendo maravillosamente la sabiduría de los santos con la ciencias humanas y naturales. Después se vio obligado a aceptar la sede episcopal de Ratisbona, desde la cual se esforzó asiduamente en fortalecer la paz entre los pueblos, aunque al cabo de un año prefirió la pobreza de la Orden a toda clase de honores, y murió santamente en Colonia, en la Lotaringia Germánica.
Patronazgos: patrono de teólogos, filósofos, técnicos médicos, científicos de ciencias exactas y naturales, estudiantes, escolares, mineros.
Refieren a este santo: Beato Ambrosio Sansedoni, Beato Inocencio V, Beato Jordán de Sajonia, Beato Juan de Vercelli, Santo Tomás de Aquino.
Santos Fidenciano, Valeriana, Victoria y
diecisiete compañeros, mártires
En Hipona Regia, de Numidia, los veinte santos mártires cuya fe
victoriosa celebró san Agustín y de los cuales solo se recuerdan los nombres
del obispo Fidenciano, de Valeriana y de Victoria.
Santos Gurias y Samonas, mártires
En Edesa, de la región de Osroene, santos mártires Gurias, asceta, y
Samonas, que bajo Diocleciano, después de prolongados y crueles tormentos,
fueron condenados a muerte por el prefecto Misiano y decapitados.
San Félix de Nola, obispo
En Nola, de la Campania, san Félix, con cuyos cuidados pastorales y
devoción se honra la ciudad.
San Maclovio de Alet, obispo
En Bretaña Menor, san Maclovio o Macuto, obispo de Alet, que, nacido en
Cambria, murió en Saintes.
San Desiderio de Cahors, obispo
En Cahors, lugar de Aquitania, san Desiderio, obispo, que construyó
iglesias, monasterios y edificios para el bien común, sin olvidarse de preparar
las almas para su celeste Esposo, como verdaderos templos de Cristo.
San Sidonio, abad
En Rouen, de Neustria, san Sidonio, abad, oriundo de Irlanda, que hizo
vida monástica primero en Jumièges, después en el monasterio de Herio, en la
isla de Noirmoutier, bajo la dirección de san Filiberto, y finalmente en el
monasterio de Saint-Saens, fundado por él mismo.
Santos Marino y Aniano, mártires
En el monte Irschenberg, en Baviera, santos Marino, obispo, y Aniano,
mártires.
San Fintano, monje
En Rheinau, en la región de Helvecia, san Fintano, procedente de Irlanda,
que vivió mucho tiempo en un monasterio, pero se recluyó después en una pequeña
celda, junto a la iglesia, escondido por amor de Dios.
San Leopoldo el Piadoso, laico
En el cenobio de Klosterneuburg, sepultura de san Leopoldo, príncipe de
ese territorio, a quien se honró, aún en vida, con el sobrenombre de «Piadoso»,
pues fue siempre portador de paz y amigo de los pobres y del clero.
Beatos Hugo Faringdon, Juan Eynon y Juan
Rugg, mártires
En Reading, en Inglaterra, beatos mártires Hugo Faringdon o Cook, abad de
la Orden de San Benito, Juan Eynon y Juan Rugg, presbíteros, los cuales
opusieron tenaz resistencia al rey Enrique VIII, que intentaba apropiarse de la
autoridad de la Iglesia, y por esa causa, acusados de traición, delante del monasterio
fueron ahorcados y descuartizados.
Beatos Ricardo Whiting, Rogelio James y Juan
Thorne, mártires
En Glastonbury, también en Inglaterra, beatos mártires Ricardo Whiting,
abad, Rogelio James y Juan Thorne, presbíteros de la Orden de San Benito, que,
acusados falsamente de traición y sacrilegio, durante el mismo reinado fueron
ahorcados también y descuartizados.
Beata Lucía Brocadelli, religiosa
En Ferrara, de la Emilia, beata Lucía Broccadelli, religiosa, que tanto
en el matrimonio como en el monasterio de la Tercera Orden Dominicana
sobrellevó con paciencia muchos dolores y vejaciones.
Beato Cayo Coreano, catequista mártir
En Nagasaki, del Japón, beato Cayo Coreano, mártir, que, siendo
catequista, por confesar a Cristo fue condenado a la hoguera.
Santos Roque González y Alfonso Rodríguez,
presbíteros y mártires
En Caaró, del Paraguay, santos Roque González y Alfonso Rodríguez,
presbíteros de la Orden de la Compañía de Jesús y mártires, que ganaron para
Cristo a los pueblos indígenas abandonados, fundando las llamadas
«reducciones», donde el trabajo y la vida social se compaginaban libremente con
los valores del cristianismo, y por esto fueron asesinados a traición por el
sicario de un personaje adicto a las artes mágicas.
San José Pignatelli, religioso presbítero (1
coms.)
En Roma, san José Pignatelli, presbítero de la Orden de la Compañía de
Jesús, que trabajó mucho para reforzarla en un momento peligroso de extinción,
y se significó por su caridad e integridad de costumbres, siempre con las miras
puestas en la mayor gloria de Dios.
San José Mkasa Balikuddembé, mártir
En Mengo, lugar de Uganda, san José Mkasa Balikuddembé, mártir, que,
estando al frente del palacio real, una vez recibido el bautismo ganó a muchos
jóvenes para Cristo y defendió a los niños de la corte de las pasiones viciosas
del rey Mwenga, por lo que el rey, enfurecido, ordenó decapitarle a los
veinticinco años de edad.
Beata María de la Pasión de Chappotin de
Neuville, virgen y fundadora
En San Remo, de la Liguria, en Italia, beata María de la Pasión (Helena)
de Chappotin de Neuville, virgen, que, enamorada de la humildad y sencillez de
san Francisco, fundó las Hermanas Franciscanas Misioneras de María, para el
servicio de la mujer en tierras de misión.
San Rafael de San José Kalinowski, religioso
presbítero
En Wadowice, en Polonia, san Rafael de San José (José) Kalinowski,
presbítero, que durante la guerra, en la insurrección del pueblo contra el
opresor, fue hecho prisionero por los enemigos y deportado a Siberia; después
de sufrir muchas calamidades, por fin recuperada la libertad, ingresó en la
Orden de Carmelitas Descalzos, que promovió notablemente.
Beato Miguel Díaz Sánchez, presbítero y
mártir
En Almansa, Albacete, España, beato Miguel Díaz Sánchez, presbítero
diocesano y mártir.
LITURGIA DE HOY
Antífona de entrada Cf. 1 Sam 2, 35
Suscitaré
un sacerdote fiel, que obre según mi corazón y mis deseos, dice el Señor.
O bien: Cf. Lc 12, 42
Este es
el administrador fiel y prudente a quien el Señor pondrá al frente de su
servidumbre para que reparta la ración de alimento a sus horas.
Monición
de entrada
Conmemoramos en esta celebración a san Alberto, llamado «Magno», obispo y
doctor de la Iglesia. Nació en Alemania, alrededor del año 1206. Ingresó en la
Orden de Predicadores y fue maestro de santo Tomás de Aquino en la Universidad
de París. Años después se vio obligado a aceptar la sede episcopal de
Ratisbona, desde la cual se esforzó en fortalecer la paz entre los pueblos y,
al cabo de un año, prefirió la pobreza de la Orden a toda clase de honores.
Murió en Colonia el año 1280.
Oración
colecta
Oh, Dios, que has hecho grande al obispo san Alberto Magno al conciliar la sabiduría humana con la fe divina, concédenos aceptar de tal modo el magisterio de su doctrina que, a través del progreso de las ciencias, lleguemos a conocerte y a amarte más profundamente. Por nuestro Señor Jesucristo.
Una cólera terrible se abatió sobre Israel
Lectura del primer libro de los Macabeos (1 Mac 1,10-15. 41-43. 54-57.
62-64)
EN AQUELLOS DÍAS, brotó un vástago perverso Antíoco Epífanes, hijo del rey Antíoco. Había estado en Roma como rehén y subió al trono el año ciento treinta y siete de la era seléucida.
Por entonces surgieron en Israel hijos apóstatas que convencieron a
muchos:
R. Te alabamos, Señor.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
V. Sentí indignación ante los malvados,
que abandonan tu ley.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
V. Los lazos de los malvados me envuelven,
pero no olvido tu ley.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
V. Líbrame de la opresión de los hombres,
y guardaré tus mandatos.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
V. Ya se acercan mis inicuos perseguidores,
están lejos de tu ley.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
V. La salvación está lejos de los malvados
que no buscan tus decretos.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
V. Viendo a los renegados, sentí asco,
porque no guardan tus palabras.
R. Dame vida, Señor, para que conserve tus preceptos.
«¿Qué quieres que haga por ti?». «Señor, que recobre la vista»
R. Gloria a ti, Señor.
R. Gloria a ti, Señor Jesús.
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